Su excepcional ancho de trabajo -9,35 metros- permitirá juntar 4 hileras en 1 para anchos de corte de hasta 3,00 metros y 3 hileras en 1 para anchos de corte mayores. Así, se obtienen importantes ventajas operativas y económicas:
Mejor aprovechamiento de las horas disponibles para el hilerado.
Mayor capacidad operativa de la rotoenfardadora.
Menor costo de mano de obra y maquinarias.
Posibilidad de realizar mayor cantidad de fardos por campaña.
Su diseño permite un excelente copiado del terreno ya que las vigas soporte de las ruedas de barrido articulan de manera independiente sobre el bastidor principal, asegurando que los neumáticos delanteros permanezcan siempre apoyados sobre el suelo, independientemente de su topografía. Además, cada una de las 16 ruedas posee un sistema de flotación independiente, dando como resultado un barrido total, sin pérdidas en cualquier condición de cultivo y terreno.
Las ruedas estelares están montadas sobre rodamientos, asegurando una mayor vida útil del conjunto. Se elevan y bajan hidráulicamente, seleccionando fácilmente la presión óptima de trabajo para cada condición mediante topes en los cilindros hidráulicos de accionamiento.
Para lograr siempre hileras esponjosas y uniformes, posee dos registros de roscas sobre el bastidor principal, que permiten variar en forma continua el ancho de la andana de acuerdo al volumen y estado del forraje.
Trabajando con las ruedas de barrido de una viga totalmente levantada y las restantes (de la otra viga) en posición de trabajo, es posible invertir las andanas para acelerar el secado, por ejemplo luego de una lluvia.
Una sola persona en pocos minutos, dispone el rastrillo en posición de transporte. Para ello, se pliega hidráulicamente detrás del tractor y en línea con este, de manera de no superar el ancho máximo permitido. Luego mediante una sencilla operación manual, se neutralizan los cilindros de las ruedas de barrido y se coloca una traba mecánica. Los neumáticos delanteros direccionales poseen un sistema de freno para evitar oscilaciones cuando se transita a altas velocidades.
Con el rastrillo MAINERO 5940 usted puede trabajar hasta una velocidad de 15 km/h logrando así mayor cantidad de hectáreas por día, dejando el pasto acondicionado para luego hacer la reserva seleccionada.
Este rastrillo necesita para su funcionamiento un tractor de 40 CV con una salida hidráulica simple efecto, para subir las ruedas recolectoras. Posee 8 ruedas de barrido de 1520 mm de diámetro, con 40 púas cada una de 8 mm de diámetro. Estas ruedas de barrido tienen flotación independiente. Utiliza dos neumáticos 6.00 x 16 – tipo agrícola.
Recoge dos hileras de cortadoras de hasta 3,5 m de ancho por pasada.
Regulación continua del ancho de barrido.
Ruedas de barrido de flotación independientes y montadas sobre rodamientos.
Posicionamiento trabajo-transporte rápido y sencillo.
Lanza registrable para distintas alturas de barra de tiro del tractor.
Ruedas neumáticas por detrás de las ruedas de barrido.
Rastrillos de entrega central
Suavidad en el trabajo, alto rendimiento horario, permite hacer hileras de anchos variables, esponjosas y uniformes, invertirlas, unirlas, etc.
Dos cuerpos montados en “V” realizan el barrido total del forraje, reduciendo pérdidas por deshojado.
Ocho ruedas estelares con 40 púas cada una montadas de a pares sobre doble bastidor independiente, aseguran un trabajo uniforme y perfecto copiado del terreno.
Púas o dientes, resistentes y flexibles, construidas en acero aleado.
Con un ancho mínimo de labor de 5 metros y máximo de 6,1 metros, se adapta a los distintos anchos de corte y estados y rendimientos del forraje, obteniendo andanas de buena densidad.
Sistema de flotación regulable, con resortes de compensación, para operar con la presión óptima sobre el terreno, sin dañar las pasturas y realizar una eficiente recolección o barrido.
Bajo mantenimiento, sin órganos de transmisión, sencilla operación, larga vida útil.
Una sola persona (el operador), en pocos minutos dispone el rastrillo en posición de transporte, para seguridad en rutas y caminos.
En ambos modelos, montado al elevador de tres puntos o de arrastre, el operador controla a través del sistema hidráulico del tractor la altura para ingresar o salir del trabajo, cruce de zanjas o acequias, etc.
El modelo 5965 (de arrastre), presenta además, trocha variable para poder ajustarse a los distintos anchos de corte, anchos de hilera y densidades de la hilera, sin riesgos de pisar el forraje.
RASTRILLO DE ENTREGA LATERAL.
Ideal para pequeñas explotaciones donde se requiere alta maniobrabilidad y versatilidad en el trabajo.
Rastrillar material segado con distintos sistemas y ancho de corte, cambiar de posición el material hilerado, remover o airear el forraje aplastado, hacer dos hileras de poco volumen en una sola pasada, rastrillar rastrojos de cosecha, etc., son tareas fácilmente ejecutables.
Posee cinco posiciones de trabajo y una de transporte. En esta última, queda ubicada en línea detrás del tractor para facilitar su desplazamiento por caminos, paso por tranqueras, etc.
Un bastidor montado al elevador hidráulico del tractor, sustenta cuatro ruedas de barrido provistas de dientes o púas de acero muy flexibles que giran por sí solas al contacto con el terreno o forraje.
Sus ruedas, que trabajan de a pares (sistema exclusivo del rastrillo Mainero), con un brazo soporte oscilante, compensan la presión que ejerce sobre el forraje una respecto de la otra y se adaptan a las irregularidades del terreno. De esta manera es prácticamente imposible que quede forraje sin rastrillar.
Mediante la regulación del resorte de compensación, se consigue la flotación indicada para absorber las desigualdades del terreno y ejercer una presión óptima.
El forraje es transportado por las ruedas, quedando sobre el terreno los elementos más pesados como piedras, troncos, etc., que pasan a través de las púas debido a su gran flexibilidad.